LÁGRIMAS Y SONRISAS: LOS PAYASOS SIN FRONTERAS

Tim Cunningham Presidente de Clowns Without Borders USA está en el país dictando talleres a la Fundación Narices Rojas. Tim es un payaso profesional que estudio en Dell Arte School of Physical Theatre. Durante su trabajo en zonas de riesgo como Africa y Haití se dio cuenta de que aparte de hacer reír a los demás para sanar podía hacer más por ellos. Ingresó a estudiar enfermería y salud pública y global.
Tim está convencido de que existe una gran necesidad de payasos y entretenimiento en situaciones de crisis.

Los payasos sin fronteras comenzaron su tarea bajo el liderazgo de Tortell Poltrona en España. El indicaba que las lágrimas y sonrisas están muy cerca. La explicación que nos dió Tim es que en los estados de profunda tristeza o alegría la actividad del corazón es más fuerte y la respiración cambia. Ambas emociones son similares en su impacto.

Sobre cómo hace para llenarse de buena energía, conservarla y proyectarla nos contó que esto es como olas del oceano que sería imposible realizar sin la retroalimentación. Entonces, el dar y recibir es sumamente importante.

Luego de tener importantes encuentros como payaso con personas que están en situaciones difíciles y sufriendo Tim corre para darse tiempo y procesar emociones y darles un lugar en su corazón. Además corre para recaudar fondos para la fundación y lo hace descalzo.

Tim junto a la líder de Narices Rojas

El trabajo que realizan los Payasos sin Fronteras es únicamente donde son invitados. Han estado con pandilleros, hospitales, en Sudáfrica y en Indonesia crearon un circo para las víctimas del Tsunami. La actividad trata de mejorar la calidad de vida de las personas  rompiendo las reglas como sólo un payaso lo hace. " Reirse cobre algo que no te reirías te da libertad".
También se les da la oportunidad a los participantes de ser payasos.

Niña rescatada de prostitución

La magia es que los adultos se vuelven niños. Y los niños que están sufriendo pueden ser niños alrededor de los payasos. Como anécdota cuenta que cuando estuvieron en Haití en un hospital lo convirtieron en discoteca. Había una niña ingresada por malnutrición. Después de la sesión con los payasos la niña murió. Ellos salieron de la sala y lloraron todos juntos. En ese momento Tim decidió estudiar más para ayudar de otra forma.

Niña rescatada luego de la visita de los payasos salió de estado de shock

Al momento cuentan con alianzas en varios países donde dictan talleres comunitarios. Para ellos la risa es la mejor medicina. La alegría, la risa te pone en contacto desde otra perspectiva con el corazón. Tim piensa que todos tenemos derecho a experimentar eso y jugar más.

Su próxima parada es en Brasil para dictar un taller. La organización se mantiene con las donaciones y ellos son voluntarios que no reciben sueldo. Sobre el trabajo de ser payaso aclara que para ser gracioso hay que conectar y lograr un fuerte vínculo con al audiencia. Así como un doctor exitoso se conecta con el paciente y este sana, los payasos se conectan con el público y son graciosos. El payaso debe saber comprender a su audiencia y saber jugar. Para esto hay que formarse.

Sintiendo el latido del corazón del otro

Compartiendo con los payasos